14 d’abril 2008

Diga 33

Las Autoridades Sanitarias se quejan de que la gente va a urgencias por "tonterías" que podrían ser solucionadas por el CAP de turno. Las Autoridades Sanitarias deberían ir al oftalmólogo. Si no ven lo que pasa en los CAP, aquí dejo un pequeño aviso, para que vean... y no hagan nada.

El otro día fui al médico. Es decir, fui al especialista. Era mi segunda visita al mismo, pero fue la primera. Aunque parece raro, es así. Mi segunda visita fue la primera.
Pero vayamos por partes y empecemos por el principio...

A principios de septiembre me empezó a doler la muñeca derecha. Después de comentarios jocosos sobre cómo me podría haber echo algo en la muñeca (sin golpes ni similares) para que se me inflamara de esa forma, toda la gente consultada me dijo (casi con las mismas palabras) lo mismo:
- Ves al médico.
Y fui. Bueno, eso es un decir. Que ahora no va así. Primero llamas. Te pasas cómo 5 minutos esperando con una musiquita (supuestamente conocida) versionada por un borracho con un Casio (blanco). Luego te preguntan si es una urgencia. Y claro, cómo no me colgaba la mano, ni sangraba cómo un episodio de Dexter, dije que no. Pues ale, a esperar 1 semana y media. ¡Bien!

Llegó el día señalado y fui a ver al buen (¿?) doctor, que me dijo que eso era una tendinitis. Cuando le pregunté a que podía ser debida la tendinitis, se encogió de hombros. Ahí tus huevos. Voy porqué tengo una inflamación, y me dicen que tengo una inflamación de un tendón. Y para eso estudian medicina. Durante años. Y algunos, hasta se especializan.

Al cabo de una semana y media más, volvía a estar ahí. Con la misma tendinitis pero con anti-inflamatorios y relajantes musculares hasta las cejas. Y me dolía más. Le comenté sutilmente que quería que me viera un traumatólogo. Me receto más anti-inflamatorios y relajantes musculares... Y la visita para el especialista, el 30 de noviembre. Es decir, más de un mes y medio más tarde. Y yo, sin poder sostener ni un lápiz. Así que le devolví las recetas mientras le decía que mi estomago no esa nada del otro mundo, pero que me lo quiero mucho, oiga usted.

Me pasé ese mes y medio prácticamente sin hacer nada con la mano derecha. Ni gimnasio, ni escalada, ni natación ni... ni eso. Una tortura. Por no poder hacer eso, claro.

El 30 de noviembre fui al especialista. Después de esperarme 55 minutos en la consulta (total, al cabo de un mes y medio, ya no viene de ahí), el traumatólogo me dijo que necesitaba unas radiografías para poder saber el alcance del problema, a la par que también me hiciera una resonancia de la muñeca.
Para la resonancia, me llamaron el 9 de enero. Me la hice el 23.
Para las radiografías aún sigo esperando.

Pero cómo no quería esperar más, a finales de enero llamé para volver a quedar con el traumatólogo para que viera la resonancia. Supongo que ese día los dioses estaban de buenas o estarían en medio de una bacanal, porqué había quedado un visita libre para el día siguiente. Así que fui, con mi flamante resonancia. Y mi ipod, porqué ésta vez me lo vi venir y me pasé una hora y cuarto esperando. Total, que cuando al final entro para ver al especialista, en mi segunda visita... Resulta que es otro médico. Y cuando le digo que yo tengo hora con el dr. tal (ya ni me acuerdo cómo se llamaba), me dice que ese es él. Así que vete a saber con quien demonios hablé la primera vez. Lo mejor de todo, es que a él no pareció sorprenderle el echo de que de dos visitas con el mismo doctor, hubiera hablado con dos personas distintas. A lo mejor que es que se turnan, para no estresarse.

Aun mirándolo con recelo, le acerqué la resonancia. Se la miró, se miró el informe, me tocó (en términos médicos creo que ellos no tocan, ellos palpan) las muñecas y decidió que tenía líquido sinovial en el lugar incorrecto. Así que se me quedó mirando con pose profesional (no, no de ésa profesión), con la mirada de pez muerto y la boca medio boqueando, y me dijo:
- No hay problema, sigue haciendo tu vida normalmente. Si te vuelve a doler, te operamos y ya está.

Y así estoy. Haciendo mi vida normal, esperando a que mi muñeca decida petar otra vez para pasar por ese bonito teatro de los sueños que llaman quirófano.

Y la próxima vez que me pase algo, me voy directo de cabeza a urgencias, y sea lo que sea que tengo, me va a doler mucho. Me estaré muriendo. Porqué tengo claro que no me voy a pasar otra vez 5 meses esperando para que me digan que haga vida normal y así luego después poder destriparme.

Y que las Autoridades Sanitarias sigan llorando que la gente no va al CAPullo. De turno.

PS: Si els arbres no et deixen veure el bosc, crema'ls i ja hi podràs fer passar una autopista.
PPS: La vista no serà la mateixa, però el teu compte corrent, tampoc.